Italia tiene una clientela principalmente nacional y europea, pero, en términos relativos, la proporción de clientes a distancia es bastante elevada en otros países: la clientela del extranjero está muy diversificada. No obstante, Alemania es, con diferencia, el mayor mercado emisor de Italia; el país genera casi una cuarta parte de las pernoctaciones generadas por los visitantes extranjeros (es decir, el 11,5% del total de pernoctaciones), por delante del Reino Unido, Estados Unidos y Francia, que generan cada uno cerca del 4% de las pernoctaciones. No obstante, cabe señalar que el número de llegadas de británicos y estadounidenses sigue siendo muy inferior a los niveles anteriores a la crisis, mientras que el número de clientes alemanes y franceses ha aumentado durante el periodo.

Italia es el mayor mercado de Europa y el tercero del mundo en volumen de oferta hotelera global, por detrás de Estados Unidos y China, con más de un millón de habitaciones. Sin embargo, este mercado está muy fragmentado, con más de 30.000 hoteles con una capacidad media de 33 habitaciones, influenciado en gran medida por una pequeña industria hotelera independiente formada por pequeñas estructuras. La capacidad media de los hoteles de cadena es casi cuatro veces superior: las cadenas siguen teniendo poca presencia en Italia, pero a través de establecimientos más grandes, sobre todo en las grandes ciudades. Al mismo tiempo, Italia lleva muchos años ofreciendo una amplia gama de servicios de agroturismo, que sigue desarrollándose. Debido a la composición de su oferta de alojamiento turístico y residencial, también es un terreno propicio para el desarrollo del alojamiento colaborativo, apoyado por plataformas como AirBnB y HomeAway.